Degustando los vinos de Benegas con el Vinosaurio

Degustando los vinos de Benegas con el Vinosaurio

Pasó un tiempo, pero aquí estamos, en otra Mesa Vinosauria, salvo que en esta ocasión nos vimos acompañados por Francisco Rivero Segura, Comandante de la Logia Petit Verdot y líder de los Desafíos Federales. Es por eso que esta nota será un tanto distinta. Por un lado encontrarán la opinión y los consejos Vinosaurios, y seguidos a ellos vendrán las apreciaciones de la Logia Petit Verdot.

Sin mucho mayor preámbulo, esperamos tentarlos un poco, porque no es algo de todos los días poder ser parte de una degustación de una bodega tan prestigiosa como lo es: Bodega Benegas.

Barrida casi completa de Benegas

Bodega Benegas resurgió de las cenizas hará 15 años atrás, ubicada hoy en Luján de Cuyo, Mendoza, pero la familia tiene décadas de historia. En sus inicios, la familia Benegas fue dueña de El Trapiche, más de cien años atrás. Entre idas y venidas, quiebres y remates, fue el actual dueño y enólogo de la Bodega, Federico Benegas Lynch, quien decidió reinvertir en la misma y así llevarla a lo más alto del vino argentino.

Tuvimos el placer de disfrutar 9 increíbles vinos, todos con una misma línea, una misma idea, pero de una diversidad sorprendente. Precios muy variados, intenciones claras, calidad indudable. Todo esto acompañado con una gran picada los primeros, y luego una bondiola de cerdo con puré de batata, cortesía de la Vinosauria, que acompañaron la degustación sin reproches.

Ahora sí, demos inicio a los vinos que pasaron por la mesa:

Clara Benegas Chardonnay 2014

Vinosaurio: Un vino sumamente fresco de Gualtallary, para comprar de a góndolas y hacerle frente al calor que se viene. Frutal y bien armado, gran acierto de la bodega.

Logia Petit Verdot: Aromas a manzana verde y pera inundan la copa, en la boca se destaca por su acidez, buen cuerpo y largo. Es el momento ideal para comprarlo, entrada ya la primavera, para disfrutar.

Carmela Benegas Cabernet Franc 2014

Vinosaurio: Joven y sencillo, perfecto anzuelo para los que nunca probaron un rosado. Mermelada de frutillas en nariz, muy refrescante y suave.

Logia Petit Verdot: Muy frutado, aromas a fruta dulce, frutillas. En boca tiene un leve dulzor, acidez justa, ligero (piletero).

Carmela Benegas Cabernet Franc 2013

Vinosaurio: Sustancialmente distinto a su añada siguiente, lo que lo hace muy interesante. El tiempo le dio estructura e intensidad, “un rosado que no es tan rosado” se escuchó decir por ahí. Para entender por qué, no habrá más que probarlo. Consejo: por las dudas, más de una botella.

Logia Petit Verdot: Más oscuro, más complejo ya desde la nariz donde a la fruta se le agrega una nota de especias. En boca es mucho más corpulento. Es un rosado para los que gustan de los tintos.

Juan Benegas Malbec 2012

Vinosaurio: A veces los precios nos obligan a apuntar a este tipo de vinos. Elegirlo, no sería un error. Es un malbec para tomar con amigos sin pensar demasiado, pero de buena presencia tanto en nariz como en boca.

Logia Petit Verdot: Gran cambio. Ciruelas frescas en la nariz, muy fresco y vibrante. De buen cuerpo, taninos presentes, buena acidez y largo.

Benegas Libertad Vineyard 2008

Vinosaurio: Acá empieza la fiesta. Dejamos de reírnos para pasar a prestar atención únicamente a lo que tienen los vinos para ofrecernos. Es que el Libertad es notablemente distinto al Juan que acabábamos de probar, es un blend más complejo y completo. Pimientos, frutos rojos y menta en nariz. Gordito, que abraza y se queda con el gran retrogusto que presenta.

Logia Petit Verdot: es EL vino de Benegas. Un blend sin malbec que se distingue por su gran RPC y capacidad de guarda. De aromas complejos que combinan fruta, especias, herbáceos y mucho más. Llena la boca pero corre, taninos bien presentes, larguísimo con un final que combina fruta y los atributos que adquirió de la crianza en roble y botella.

Benegas Lynch La Encerrada Malbec 2011

Vinosaurio: Este es un vino Vinosaurio. Así de simple. Fuerte, grandote, bien armado, redondo e intenso. Inunda la nariz con frutillas y ciruela, invade la boca con su opulencia, llegando para quedarse, dejando unas sutiles notas a tabaco.

Logia Petit Verdot: Bomba de fruta y potencia. Malbec más bien goloso, con fruta madura combinada con vainilla y chocolate. Largo, jugoso.

Benegas Lynch La Encerrada Malbec 2012

Vinosaurio: Directo y consistente, tal vez le falta algo de tiempo. Hoy, nos quedamos con el 2011, pero es muy posible que tenga una muy buena evolución, y en un tiempo le demos su segunda oportunidad donde seguramente terminará por sorprendernos.

Logia Petit Verdot: Más elegante y estilizado. Fruta más fresca, menos presencia de la madera, mayor acidez y largo de boca. Es un vino más vertical.

Benegas Lynch Cabernet Franc 2006

Vinosaurio: Paremos un poco la pelota. Porque este vino lo merece. No es un vino de degustación, hay que darle su tiempo y dejarlo resonar en boca y cabeza. Contundente desde el inicio, aromático, floral y especiado. Taninos dulces y joven, es otro vino que también es gordito. Referente en su materia, y si se puede, para dejarlo un tiempito más de guarda.

Logia Petit Verdot: Nariz compleja, donde no predomina la fruta, se conjugan notas florales, mucha pimienta y hierbas aromáticas. Gran cuerpo, buena acidez y taninos que aún se muestran briosos a pesar de los 8 años que nos separan de su vendimia. Final larguísimo. Es un gran exponente de Cabernet Franc que aún no ha llegado a su techo. Un vino mucho más complejo que los otros cinco.

Benegas Lynch Meritage 2007

Vinosaurio: La degustación cierra con fuegos artificiales. Bodega Benegas nos dejó lo mejor para el final, y es que no es para nada fácil poner en palabras lo que transmite este vino. Más allá de su complejidad por donde se lo mire, es ese vino que te guardas para cuando se recibe el pibe o se te casa la nena. No les vamos a dar las notas de cata, porque este blend es más bien una experiencia antes que un vino con innumerables características. Tal vez Francisco pueda encontrar mejores palabras para lo que nosotros no pudimos describir. Pero nuestro consejo: guardenlo para ESE momento especial. No los va a defraudar.

Logia Petit Verdot: Es uno de los grandes vinos argentinos. Es la definición de complejidad en nariz y en boca. Es muy difícil de desglosar la nariz donde aparecen acompañando la frua unas notas de pimienta y pimientos. En la boca es fresco, gracias a su destacada acidez y repite esas notas piracínicas muy bien balanceadas con la fruta y los taninos. La única contra es que por su valor no lo podemos tomar más seguido.

Aquí concluye nuestra degustación de Bodega Benegas. Como habrán visto, la variedad es amplia, y lo que transmite cada vino también. En todos es posible vislumbrar el hilo que los une, la idea, el estilo. Son vinos elegantes de remarcable actitud cada uno, que mantienen la tradición y lealtad a lo que la bodega busca. ¿Pero qué busca exactamente? En mi opinión personal, experiencias. Porque muchos a veces dirán que algunas de las muestras pueden excederse un poco en los precios, pero la verdad es que dentro de estas 9 botellas, hay vinos para todos los gustos. Y dentro de esa diversidad, cada quien es libre de elegir. Es ahí donde uno puede optar por un Clara para acompañar la picada en el asado, o un Carmela para tomar al lado de la pileta, un Juan con amigos, un Libertad y los Malbecs en un cumpleaños, y el Cabernet Franc o el Meritage en esos días únicos que merecen ser recordados. Porque hay de todos los colores (literalmente), y queda en el comprador elegir para qué evento comprar qué vino. Además, si hay algo de lo que no podemos dudar, es de que Bodega Benegas regala en cada botella, una experiencia en la que la calidad: es innegable.

No piensen en cuánto pagan por una botella, sino en cómo la acompañan.

Link a Nota Original de el Vinosaurio

Degustando los vinos de Benegas con Vinosaurio